—¿Por qué lees tanto? —(…) Mi mejor arma está en el cerebro. Mi hermano tiene su espada; el rey Robert tiene su maza, y yo tengo mi mente… Pero una mente necesita de los libros, igual que una espada de una piedra de amolar, para conservar el filo. —(…)—. Por eso leo tanto, Jon Snow.

TYRION LANNISTER.

Heraldica del Sacro Imperio Romano

 


Heráldica del Sacro Imperio Romano




Introducción.
 
El Sacro Imperio Romano Germánico

 (en alemán: Heiliges Römisches Reich; en latín: Sacrum Romanum Imperium Sacrum Imperium Romanum​, y también conocido como el Primer Reich o Imperio antiguo) fue una agrupación política ubicada en la Europa occidental y central, cuyo ámbito de poder recayó en el emperador romano germánico desde la Edad Media hasta inicios de la Edad Contemporánea.
Su nombre deriva de la pretensión de los gobernantes medievales de continuar la tradición del Imperio carolingio (desaparecido en el siglo X), el cual había revivido el título de Emperador romano en Occidente,​ como una forma de conservar el prestigio del antiguo Imperio romano. El adjetivo «sacro» no fue empleado sino hasta el reinado de Federico Barbarroja (sancionado en 1157) para legitimar su existencia como la santa voluntad divina en el sentido cristiano. Así, la designación Sacrum Imperium fue documentada por primera vez en 1157,​ mientras que el título Sacrum Romanum Imperium apareció hacia 1184​ y fue usado de manera definitiva desde 1254. El complemento Deutscher Nation (en latín: Nationis Germanicæ) fue añadido en el siglo XV.
El Imperio se formó en 962 bajo la dinastía sajona a partir de la antigua Francia Oriental (una de las tres partes en que se dividió el Imperio carolingio). Desde su creación, el Sacro Imperio se convirtió en la entidad predominante en la Europa central durante casi un milenio hasta su disolución en 1806. En el curso de los siglos, sus fronteras fueron considerablemente modificadas. En el momento de su mayor expansión, el Imperio comprendía casi todo el territorio de la actual Europa central, así como partes de Europa del sur. Así, a inicios del siglo XVI, en tiempos del emperador Carlos V, además del territorio de Holstein, el Sacro Imperio comprendía Bohemia, Moravia y Silesia. Por el sur se extendía hasta Carniola en las costas del Adriático; por el oeste, abarcaba el condado libre de Borgoña (Franco-Condado) y Saboya, fuera de Génova, Lombardía y Toscana en tierras italianas. También estaba integrada en el Imperio la mayor parte de los Países Bajos, con la excepción del Artois y Flandes, al oeste del Escalda.

Debido a su carácter supranacional, el Sacro Imperio nunca se convirtió en un Estado nación o en un Estado moderno; más bien, mantuvo un gobierno monárquico y una tradición imperial estamental. En 1648, los Estados vecinos fueron constitucionalmente integrados como Estados imperiales. El Imperio debía asegurar la estabilidad política y la resolución pacífica de los conflictos mediante la restricción de la dinámica del poder: ofrecía protección a los súbditos contra la arbitrariedad de los señores, así como a los estamentos más bajos contra toda infracción a los derechos cometida por los estamentos más altos o por el propio Imperio.
Entonces, el Imperio cumplió igualmente una función pacificadora en el sistema de potencias europeas; sin embargo, desde la Edad Moderna, fue estructuralmente incapaz de emprender guerras ofensivas, extender su poder o su territorio. Así, a partir de mediados del siglo XVIII, el Imperio ya no fue capaz de seguir protegiendo a sus miembros de las políticas expansionistas de las potencias internas y externas. Esta fue su mayor carencia y una de las causas de su declive. La defensa del derecho y la conservación de la paz se convirtieron en sus objetivos fundamentales. Las guerras napoleónicas y el consiguiente establecimiento de la Confederación del Rin demostraron la debilidad del Sacro Imperio, el cual se convirtió en un conjunto incapaz de actuar. El Sacro Imperio Romano Germánico desapareció el 6 de agosto de 1806 cuando Francisco II renunció a la corona imperial para mantenerse únicamente como emperador austríaco, debido a las derrotas sufridas a manos de Napoleón I.




Grandes Dignidades del Imperio





Los príncipes electores que ostentaban alguna de las Grandes Dignidades del Sacro Imperio, aumentaban sus escudos con el insignia que correspondiera a la dignidad que poseían. Dignidad y Descripción

Gran Chambelán del Imperio
De azur, un cetro de oro.
En un campo de azur, dos cetros puestos en sotuer.
Gran Senescal o Mayordomo Mayor del Imperio
En un campo de gules, un orbe o mundo de oro.

Gran Tesorero del Imperio
En un campo de gules, la Corona del Sacro Imperio Romano Germánico de oro.

Gran Mariscal del Imperio
En un campo cortado de sable y de plata, dos espadas de gules puestas en sotuer.






                 Grandes electores.
 



Los siete electores de Enrique VII del Sacro Imperio Romano
Germánico, miniatura del Codex Balduineus.

(en alemán: Kurfürst) en el Sacro Imperio Romano Germánico era un miembro del colegio electoral que tenía la función de elegir a los emperadores de Alemania. Se definen sus funciones y los primeros príncipes electores por la Bula de Oro de 1356. Durante y después del siglo XV, en realidad se limitaban únicamente a formalizar lo que era, de hecho, una sucesión dinástica. Formalmente, elegían al Rey de Romanos, que se convertía en Emperador del Sacro Imperio únicamente cuando era coronado por el papa. Carlos V (Carlos I de España) fue el último en ser realmente coronado; todos sus sucesores fueron meramente "Emperadores Electos". Los electores se encontraban entre los príncipes del Imperio, pero tenían ciertos privilegios (además de los electorales), que se perdían cuando eran destituidos de su cargo de elector.
Durante una gran parte de la historia del Sacro Imperio (legalmente desde el siglo XIV) había siete electores, los arzobispos de Maguncia, Tréveris y Colonia, el Rey de Bohemia, el Conde Palatino del Rin, el Duque de Sajonia y el margrave de Brandeburgo. Los tres últimos son conocidos también como el Elector Palatino, el Elector de Sajonia y el Elector de Brandeburgo, respectivamente. Durante el siglo XVII se añadieron otros electores, que incluían los Duques de Baviera (electores de Baviera) y los Duques de Brunswick-Luneburgo (electores de Hanover). 
A comienzos del siglo XIX se crearon nuevos electores, pero nunca participaron en ninguna elección, ya que el Sacro Imperio fue abolido el 8 de agosto de 1806 bajo presiones de Napoleón Bonaparte.



Escudos de Príncipes Electores.





Baviera

Escudo de Baviera y palatinado

Hasta 1753 y abreviado: Fusado o fuselado, de plata y azur, puesto en banda.
1753-1806: Cuartelado, en el primero y cuarto, fusado o fuselado, de plata y azur (por Baviera); en el segundo y tercero, de sable, un león rampante de oro, armado, lampasado y coronado de gules (por el palatinado); sobre el todo, en escusón de gules, un orbe de oro ( por la Senescalía o Mayordomía del Sacro Imperio).
Bohemia
De gules, un león rampante y horquillado de plata, armado, lampasado y coronado de oro.''
Brandeburgo

De plata, un águila exployada de gules, picada y membrada de oro, lampasada de gules y coronada de una birreta electoral.


Hanover
Brunswick-Luneburgo (Hannover)
Escudo partido, en el primero, de gules, dos leones pasantes de oro, armados y lampasados de azur (por Brunswick); en el segundo, de oro sembrado de corazones de gules, un león rampante de azur, armado de lo mismo y lampasado de gules (por Luneburgo).
El Arzobispado de Colonia,  Archicancellarius per Italiam

De plata, una cruz plena de sable.
El arzobispado de Maguncia,  Archicancellarius per Germaniam,

De gules, una rueda de seis radios de plata.

palatinado

Palatinado
Hasta 1214: De sable, un león rampante de oro, armado, lampasado y coronado de gules.
1214-1804: Cuartelado, en el primero y en el cuarto, fusado o fuselado, de plata y azur, puesto en banda (por Baviera); en el segundo y tercero, de sable, un león rampante de oro, armado lampasado y coronado de gules (por el Palatinado); 

 sajonia

Sajonia

En burelado de sable y de oro, un crancelín de sínople.

El Electorado de Tréveris, Archicancellarius per Galliam
De plata, una cruz plena de gules, que es la Cruz de San Jorge.


Antiguo elector de suabia.

Suabia







San Franco de Assergi.





Martirologio Romano: Cerca de Assergi, en los Abruzos, Italia, san Franco, eremita, que se construyó una pequeña celda en una cueva entre abruptas rocas, donde llevó una vida de austeridad y sencillez († s.XII).


Fecha de beatificación: Su culto fue confirmado por el papa Benedicto XIV en 1757.


Biografía:  Natural de Roio (L’Aquila, Abruzzos), en el seno de una familia de campesinos ricos. Bajo la dirección de un sacerdote de su pueblo, Palmerio, realizó los primeros estudios. Ingresó como benedictino en el monasterio de San Giovanni Battista de Lucoli, donde vivió 20 años, después se retiró para vivir como eremita. El primer periodo lo paso en los bosques de Lucoli, comiendo "herbulis, glandulis et agrestibus pomulis". En el segundo, el más incierto, vagó aquí y allá sobre la cadena montañosa del Apenino abrucese, que culminó en las faldas del Velino; después pasó a la cadena montañosa del Gran Sasso. 


El tercer período lo pasó sobre los montes de Assergi: cinco años en Vasto, quince sobre los montes Sabinos. En Vasto eligió un lugar pintoresco, pero árido y sin refugios, construyó una choza, según el sistema tradicional de los pastores y por sus oraciones manó agua de la roca; hoy esta fuente, a 1800 m. sobre el mar, se la conoce como "el agua de san Franco"; los peregrinos la beben para obtener la curación de las enfermedades, especialmente de la piel. Pasó a los montes Sabinos para huir de los visitantes, y se quedó en la localidad cercana de Assergi, más agreste, donde, según la leyenda, una osa con tres oseznos lo guió a una gruta y durante mucho tiempo le hizo compañía. En las fiestas principales del año se acercaba a Assergi para recibir la Comunión, quizás en la iglesia de Santa Maria en Silice.
Aquí sucedió el episodio en el que salvó a un niño de las fauces de un lobo. Cuando el eremita por su mala salud, presintió su próximo fin, quiso recibir los últimos sacramentos, después se le dejó solo con los brazos en cruz. Por la noche, las campanas de Santa Maria en Silice repicaron solas antes de la hora señalada y los gallos del pueblo cantaron al mismo tiempo. La población se despertó, miró en dirección de la gruta y vio una luz: allí se encontraron al eremita muerto. Con gran veneración su cadáver fue llevado al pueblo y sepultado en la cripta de la iglesia del monasterio.



El 5 de junio se celebra la fiesta en honor de San Franco di Assergi, con la solemne procesión por las calles de la ciudad, la exposición de las reliquias y la peregrinación al Acqua di San Franco, la fuente del Gran Sasso, un destino para peregrinos de todo el mundo parte de Abruzzo.




Sirvientas.











































2 comentarios:

  1. grandes dignidades de un imperio muy importante historia de europa

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  2. Para estudiar el desarrollo de los tipos domésticos en la cultura romana hay que referirse incuestionablemente a Pompeya, y las demás ciudades sepultadas, en el caso de las domus y las villae, y a Ostia, en el caso de las insulae, o casa de alquiler, ya que Roma conserva muy pocos restos de estas unidades de habitación debido al desarrollo que como núcleo urbano ha tenido, destacando los de la Via Biberatica (en lo https://noticiasdelloretdemar.es/modelo-de-carta-de-oficio/

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